miércoles, 2 de mayo de 2012

The Avengers: Before and After The Fact.

(Esto escribí sobre los Avengers para la revista Haciendo Cine, antes de siquiera verla)



En un principio parecía una grandiosa idea: una franquicia de películas de superhéroes que conduzca, finalmente, a un gran espectáculo conjunto, la primera de un super equipo armada en tiempo real, a la manera de los comics ¡El primer cross-over cinematográfico a gran escala!

Era una destilación de un viejo precepto del comic de superhéroes, tan antiguo como la Segunda Guerra Mundial: si tenés uno y es exitoso, 6 o 7 en un mismo grupo serán exitosos exponencialmente. Coincidía con un viento favorable en los grandes estudios a las trilogías, películas conectadas por elementos temáticos, grandes sagas. Y, además, representaba la aparición de Marvel Comics como productor de sus propias películas, un sueño largamente anhelado dentro de la compañía, su salto al gran rodeo, una empresa de entretenimientos completa, y no solo una pequeña e intrascendente editorial.

Y, aparentemente, la apuesta ha pagado bastante bien. No solamente han tenido éxitos desde Iron Man 1 sino que los ingresos de las películas permitieron sanear las finanzas de Marvel Comics lo suficiente (plagada por una bancarrota incurrida en el año 1996 cuando intentó apoderarse del mercado de comics norteamericano comprando su propia distribuidora solo para que todo se derrumbe a su alrededor) como para volverla una manzana muy apetitosa para Disney, quién compró la editorial y todo su universo en el 2009 por 4 billones de dólares. Lo único que aún desea es rescindir los contratos que tiene con Sony, Paramount y Fox para recuperar sus últimos personajes (los Fantastic Four, X-Men, Spider-Man) y producir películas de la casa con ellos.

Y ahora nos enfrentamos con el producto final de aquello que se presenta como una movida novedosa y creativa pero que, a fin de cuentas, se parece mucho más a la sinergia corporativa. Porque si bien las películas de Marvel Studios (y The Avengers en particular) intentan decirnos que son el pico máximo de la épica superheroica en el cine, en realidad son películas de cartón: aburridas, formulaicas, con los guiones con menos alma que se han visto en mucho tiempo, actuaciones que parecen extraídas con tirabuzón, efectos especiales más bien berretas y muy poco corazón. Iron Man 1 tiene cierta chispa, que rápidamente se pierde cuando Robert Downey Jr. se vuelve un monigote de sí mismo. Pero tanto Captain America (en donde ni el gran Chris Evans logra arrancarnos una sonrisa) como Thor son dos tristes y vacías cáscaras cuyo único objetivo es colocar a sus personajes en una posición en la cual puedan ser utilizados por esa gran esperanza blanca del cine de masas que se supone será Avengers. Hacía mucho tiempo que no sufríamos tanto viendo películas tan mecánicas (y eso que estamos acostumbrados a ver blockbusters), que estaban tan lejos de ese estallido de color e imaginación en el cual estaban inspiradas.

El hecho de que frente a Avengers esté Joss Whedon no es ningún motivo de confianza. Whedon pertenece, junto con Kevin Williamson y J.J. Abrams, a esa generación de productores de televisión fantástica de gran aceptación entre los fans pero cuyas ideas pueden ser descriptas, caritativamente, como derivativas. Mercanchifles sin verdadera imaginación cuyas única gracia parece enmarcarse en darle un giro a ciertas formas y géneros con los personajes más superficiales que pueden inventar. Joss Whedon, además, se caracteriza por sus continuos fracasos de público, por sus series abortadas (luego de Buffy) siempre tempranamente y por ser un guionista de comics bastante mediocre. No malo, pero lento, anclado en una sensibilidad telenovelesca profundamente ochentosa (en cuanto a tiempos de comic: su influencia principal, diríamos, es Chris Claremont en los X-Men), comida confortable que llena pero no deslumbra.

Los trailers, además, muestran una película con un CGI bastante triste y con unos villanos inclasificables. De toda la riquísima galería de villanos de los Avengers han elegido a Loki, bastante racional, pero un Loki, como todo en esta franquicia, descremado, que no irradia amenaza ni la suprema manipulación que lo caracteriza. Sobre sus secuaces, poco se sabe, en un momento se supuso que iban a ser los skrulls, raza de aliens cambiaformas, pero ello ha sido negado tanto por Marvel como por Whedon. La falta absoluta de detalles, más el hecho de que el director dice que los skrulls serían demasiado complicados de realizar en una película con siete estrellas, indican probablemente otro villano genérico, una raza de seres sin carisma ni forma ni historia, bastante apropiada.

El resultado es que lo que debería ser un gran evento para un fanático del comic como el que escribe, se ha reducido a un completo anticlímax. La película menos esperada en la historia de las películas de superhéroes. Como cuando viene tu estrella de rock favorita pero ya está vieja, acabada y toca el 70% de su set de sus tres últimos y peores discos. Quizás la calidad de la película sea excelente, el corazón esté ahí y nos callen la boca, pero el track record de Marvel Studios no permite ser muy optimista.

El cine, durante años, buscó la manera de trasladar los superhéroes al celuloide de una manera creíble. Esa obra maestra que es el Superman de Donner lo decía en el poster: “creerás que un hombre puede volar”. Durante años el costo y la calidad de los efectos especiales lo hicieron imposible o ridículo. Pero una vez que la tecnología estuvo a la altura, se reveló la contracara de un mundo sin filmes de superhéroes: la fábrica de hacer chorizos. Si hay algo que han demostrado los intentos más exitosos de trasladarlos al cine es que alguna visión más allá de lo comercial tiene que existir, sino los clichés en los cuales están acurrucados, la mecanicidad de muchas de sus historias queda a la luz. El comic, como el cine, no es solo el ordenado pasaje de un estado a a un estado b (mejor conocido como narrativa) sino también estilo. Lamentablemente, todo indica que la tagline del poster de los Avengers debería ser: “creerás que un superhéroe puede realizar un informe de ingresos del segundo trimestre del año fiscal impecable”.

(Y esto es lo que escribí después de verla el domingo)


The Avengers no es una mala película. Está bien. Es, y ésta es la palabra que mejor la describe, adecuada.

No es tan mala como las anteriores películas de Marvel Studios, lo cual tampoco es una tarea muy complicada. Tiene un poco más de corazón, se nota que Whedon entiende básicamente a los personajes y el concepto “Avengers” está bien transmitido. El secreto es el siguiente: Whedon es, como mucho, un tipo que sabe imitar estilos de cosas pasadas con un ligero giro moderno, sus creaciones siempre son pastiches que (supuestamente) se salvan por su utilización y construcción de personajes. En el comic, éste mismo tipo de estilo es totalmente flaco, aburrido y previsible. No podés hacer unos X-Men de Claremont de segunda cuando estás siguiendo a New X-Men de Morrison. Es conservador, es previsible, es poco arriesgado. Pero en una película, la primera gran confrontación con el público masivo, un acercamiento que signifique un retorno a las raíces y que transmita el concepto principal es muy adecuado. Por ello ésta película está a años luz de los aburridísimos, insoportables, comics de Joss Whedon.

Pero es una película realizada por un buen soldado, por un tipo sin vuelo. Creo que ese es el pecado de la película: no tiene imaginación. Un resumen de su argumento iría algo así:

1. Algo muy malo pasa y Nick Fury llama a los Avengers.
2. Escenitas donde nos presentan a los personajes.
3. Presentación de la base de los Avengers, una mezcla entre un Helicarrier y un Triskellion. Lugar donde se van a pasar 2/3 de la película. ¿Hubo alguna vez un grupo de superhéroes que se pase tanto tiempo en su base de operaciones? ¡Siempre están huyendo a salvar el mundo o escapando de que la destruyan! Yo me imagino la Mansión de los Avengers en estado continuo de abandono.
4. Salen a hacer un par de mandados que solamente sirven para demostrar que a) Iron Man es impulsivo b) Thor habla raro c) El Capitán América manda.
5. Larguísimas e insoportables escenas dentro de una base que es otra puta fantasía militar del cine de Hollywood de los 00s, donde hablan, se pelean, se sacan cosas en cara, para terminar con un montón de pasillos y escenarios indistinguibles unos de otro (el gran problema del cine de acción de los últimos 20 años: todas sus instalaciones militares, industriales, todas sus ciudades, se ven exactamente igual) totalmente destruidos y los héroes dispersados.
6. Un sacrificio TOTALMENTE ABSURDO de un personaje QUE A NADIE LE IMPORTA para unirlos en su lucha.
7. Una larga escena de lucha en New York contra los Aliens Mas Genéricos Del Mundo.
8. Fin y la promesa de más aventuras.

En definitiva, los escenarios, los enemigos, el estilo, la creación que debería fluir desbocada en esta, que es, en definitiva, LA PRIMERA PELÍCULA DE UN SUPERGRUPO, está ahí reducido a un montón de tipitos en motocicletas que vuelan y un par de ballenas gigantes (mediocre fuerza invasora  si tiene como objetivo conquistar toda la tierra). Y en un montón de pasillos indistintos de bases militares.

Después, hay elementos que están bien. El Hulk (o, más bien, el Banner) de Ruffalo es muy bueno, la mejor interpretación de Banner hasta el momento en el cine. Chris Evans es un genio y merece mejores películas. Scarlett tiene mucho protagonismo pero sin embargo bien aprovechado, destacando lo que hace a Black Widow interesante y diferente. Thor y Hawkeye son dos ceros a la izquierda. El Tony Stark de Robert Downey Jr. ya es insoportable más allá de todo lo insoportable. Las interacciones entre ellos están bien llevadas, supongo que Whedon tiene un buen director de actores.

Es un 6. Nada más que eso. Está hecha con dignidad y respeto. Aburre en cantidades moderadas. No tiene una brizna del estilo y la superficie y el encanto que hace que un comic como los Avengers sea tan fabuloso. Pero tampoco se sumerge en las profundidades de la autoparodia, del cancherismo y de la mediocridad involuntaria. Es una película whedoniana, ni fu ni fa, ni muy muy ni tan tan, middle of the road absoluto. Tanto, que ni siquiera me produce el odio suficiente como para destruirla. 


7 comentarios:

SpaceLord dijo...

y no dicen avengers assemble!

Diegzor dijo...

¿Te animás a recomendarme comics de los Avengers que me hagan entender que los Avengers están buenos? Gracias.

Otra cosa: disculpá si tomo con excepticismo tu crítica, pero el que hayas escrito impresiones tan negativas ANTES de verla sugiere un negative bias bastante pesado en tu visión.

Más allá de eso, bien por mirarla con ojo crítico, estoy harto de oir que es lo mejor del mundo.

elJotapé dijo...

El "Un sacrificio TOTALMENTE ABSURDO de un personaje QUE A NADIE LE IMPORTA" sobre la escena final de la película (que acá no llegó todavía) da lugar al nacimiento de SPOILER nada más ni nada menos que el aburridisimo "Vision", y si, un personaje aburrido da lugar a otro personaje más aburrido aún.

By the way, los skrulls creo que también son parte de la paramount o de la fox (o de quien sea) y no los pueden usar por derecho.

Amadeo dijo...

Obvio que estaba prejuiciado: odio a Joss Whedon. Y las películas que pavimentaban el camino eran TAN mediocres que no me insuflaban nada de entusiasmo.

Astrotomie dijo...

Pues Robert Downey Jr me pareció más relajado que en sus otras películas, y el desarrollo del Hulk ( tanto los efectos especiales como la interpretación de Ruffalo) me pareció lo mejor de la película, el tipo derrocha carisma. Sin embargo yo también creo que es una película mediocre, que aun no entiendo como a todo el mundo le pareció la octava maravilla.

Astrotomie dijo...

Pues Robert Downey Jr me pareció más relajado que en sus otras películas, y el desarrollo del Hulk ( tanto los efectos especiales como la interpretación de Ruffalo) me pareció lo mejor de la película, el tipo derrocha carisma. Sin embargo yo también creo que es una película mediocre, que aun no entiendo como a todo el mundo le pareció la octava maravilla.

astrot dijo...

Para ser sincero me gusto la peli, tomandosela como lo que es, una peli basada en un comix,
en la que uno sabe que no puede esperar que ni se asome a la historia original,
y que por lo demás daría para miles de películas de larga duración y que solo gustarían a los realmente
fanáticos y seguidores del genero, en si esta es una adaptación hecha para agradar al espectador común y
yo creo que lo logra con creces, no como otros fiascos como daredevil,
ghost rider, Thor (francamente mala), bueno y cambiando de genero al manga Dragon Ball (lo peor)